Lo necesitaba. Hacer algo así. Cojer un tren e irme unos cientos de quilometros más para allá. Aislarme del ruído del mundo, del ruído del día a día.
Y la excusa que he encontrado no podía ser mejor. Vamos, siempre es la misma: la música. Este fin de semana se celebra el Getafe Electric Festival. Un gran cartel al que me he apuntado para el segundo día. La principal atracción: Metallica. Hay alguna que otra perla, pero ésta es la principal.
Ya me hace ilusión por ser la primera vez que veré a la mítica banda californiana. Pero tambien me quita el gusto amargo que me quedó hace unas semanas cuando suspendieron por las lluvias un concierto de Scorpions en Benidorm y mi pequeña aventura que me había montado entonces se vino abajo.
Así que me voy para allá a disfrutar, aunque caiga el diluvio universal. Pero, amenazo. Como dijo aquel: ¡volveré!
Y la excusa que he encontrado no podía ser mejor. Vamos, siempre es la misma: la música. Este fin de semana se celebra el Getafe Electric Festival. Un gran cartel al que me he apuntado para el segundo día. La principal atracción: Metallica. Hay alguna que otra perla, pero ésta es la principal.
Ya me hace ilusión por ser la primera vez que veré a la mítica banda californiana. Pero tambien me quita el gusto amargo que me quedó hace unas semanas cuando suspendieron por las lluvias un concierto de Scorpions en Benidorm y mi pequeña aventura que me había montado entonces se vino abajo.
Así que me voy para allá a disfrutar, aunque caiga el diluvio universal. Pero, amenazo. Como dijo aquel: ¡volveré!
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